Medianoche del domingo. Kanye West echa andar la idea de hacer un concierto sorpresa en el Webster Hall, en Nueva York. Sin saberlo, también echa a andar la historia de un caos callejero que terminó con la policía dispersando a una multitud.
El director creativo de West, Virgil Abloh pone en Instagram un mensaje para anunciar que además de Kanye, también cantarán Big Sean, Pusha T y Travis Scott, todos ellos parte del sello discográfico del rapero. Originalmente, esa noche Kanye West iba a cerrar el festival Governor’s Ball, pero fue cancelado ante el riesgo de que las malas condiciones climáticas provocaran algún incidente entre los asistentes. Media hora después del anuncio de Abloh, cuatro mil personas ya estaban en las calles alrededor del Webster Hall, cuya capacidad es apenas de mil 500. Dos calles aledañas a Union Square estaban repletas de fans que querían entrar al supuesto concierto que empezaría a las 02:00 horas.
Los seguidores del popular rapero se subieron al techo de autos, a contenedores de basura, a andamios y se colgaron de ventanas con la esperanza de obtener una mejor perspectiva. La esposa de Kanye, Kim Kardashian, se sumó a la iniciativa al postear en sus redes sociales un video en el que se ve a su esposo pidiendo que se comuniquen con “el alcalde” para bloquear las calles alrededor del Webster Hall y permitir la llegada de los fans.
Entonces el caos se generalizó porque la gente comenzó a intentar entrar al auditorio, cuyas puertas permanecían cerradas así como las taquillas. En medio del desorden, el diario “The Guardian” reportó que una joven resultó herida en una pierna. “Sus amigos la cargaron hasta un coche y llevaba la pierna ensangrentada”.
El concierto secreto iba a comenzar a las 02:00 horas, y según el perfil de West en Twitter, las entradas se habían agotado ya una hora antes.
El comentario resultó confuso para los fans ya que en realidad las taquillas nunca se abrieron y por Internet nunca hubo venta de boletos. Faltando 15 minutos para las 2:00 horas, un hombre salió del Webster Hall con un megáfono para anunciar que el concierto no se realizaría.
Entonces entró la Policía para hacer el primer intento de dispersar a los seguidores del rapero. Pero la gente, en vez de retirarse, comenzó a corear sus canciones y permaneció en la calle esperando que las puertas del foro se abrieran. Pasaron 20 minutos. Entonces reapareció el hombre del megáfono para pedirle calma a los asistentes.
“Si no se tranquilizan, entonces no habrá concierto”, dijo. El público entendió que el concierto sí se realizaría. Además, en redes sociales comenzó a circular un video en el que se veía a Kanye West en calles cercanas al Webster Hall, a bordo de un automóvil descapotable.
El cantante incluso llegó a saludar a algunos de los fans que lo vieron. Pero nunca llegó al auditorio. Minutos más tarde, la Policía fue más enérgica y ahora sí lograron dispersar a la gente. “El concierto se ha cancelado“, escribió Abloh en su cuenta de Twitter.
Según la prensa, el cantante y productor buscó sin éxito otros clubs en los que celebrar el concierto. No está claro si previamente había apalabrado la actuación con el Webster Hall. Una hora después, Kim Kardashian reapareció en redes sociales para dar una explicación sobre lo acontecido. “Lamentablemente el concierto no se pudo realizar. Lo intentamos. Él lo intentó. Pero la policía no lo permitió”. Enseguida, colocó una foto de ella en su cama.
La tarde de este lunes escribió: “Fue una locura anoche. Kanye deseaba dar su concierto pero todo se salió de control. Él tiene los mejores fans de todo el mundo”.
Comentarios
Publicar un comentario